Del lat. ineffabĭlis
'indecible'
1. adj. Que
no se puede explicar con
palabras.
¿Cómo explicar una palabra
que precisamente designa aquello que no se puede explicar con palabras?
Todos hemos vivido momentos únicos, intensos, inefables… momentos, vivencias o situaciones que nos esforzamos por explicar y transmitir con todo su brillo y esplendor a otras personas pero que jamás logramos capturar en lenguaje de palabras…
El reencuentro con una persona querida después de mucho tiempo, o el terror de una experiencia traumática pueden ser ejemplos perfectos de vivencias inefables… incluso algunas personas pueden ser inefables en sí mismas...
Además, ¿nunca nadie nos ha dicho
alguna vez aquello de: “¡ven!, tienes que ver esto con tus propios ojos”?,
quizá nos esté tratando de enseñar un objeto o un acontecimiento verdaderamente
inefables… de esos que no se pueden explicar con palabras y han de ser
vistos por uno mismo...
Pues ya tenemos una nueva incorporación a nuestro léxico cotidiano: inefable.
Pues ya tenemos una nueva incorporación a nuestro léxico cotidiano: inefable.
(Fuente: La llave del mundo)
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